--¿Cómo se realiza el diagnóstico de certeza de la enfermedad?
--El diagnóstico de confirmación corresponde al laboratorio. Cuando existe un brote el cuadro clínico unido a los datos epidemiológicos pueden ser suficientes.
--¿Ante qué primeras manifestaciones debemos consultar al médico?
--En Cuba que tenemos una situación de vigilancia y no de enfermedad, más que motivo de consulta la detección y eliminación del criadero del mosquito debe constituir una sistemática acción de salud de cada uno de nuestros ciudadanos.
--¿El padecerla una vez inmuniza de por vida?
--Haber padecido dengue por cualquiera de los cuatro serotipos virales deja inmunizado contra ese serotipo en particular y no por los otros tres. Una segunda infección por otro serotipo puede expresarse con iguales síntomas o algo peor: desarrollar una forma grave de la enfermedad con hemorragias, shock y muerte.
--¿Cuál es el tratamiento de elección?... ¿Es efectivo?
--No hay droga antiviral efectiva contra el dengue, ni existe aún una vacuna. El tratamiento preventivo es el único verdaderamente efectivo.
No obstante, los cuidados médicos integrales permiten prevenir las complicaciones y casi siempre la muerte, como ha demostrado la atención médica cubana a estos pacientes.
--¿Qué medidas en el orden personal, y también colectivas, sugiere para la prevención de esta enfermedad?
--Las medidas siempre tienen que ser colectivas y se vinculan principalmente con la erradicación de los criaderos de Aedes aegypti. No hay sistema de salud en el mundo capaz de acabar con el dengue sin la participación de la comunidad. Cualquier depósito de agua limpia o relativamente limpia que permanezca descubierta puede ser el foco a partir del cual se genere un brote epidémico.
--El espacio se termina... ¿Conoce la ciencia, doctor, a personas con una protección natural contra el dengue?
--No existe inmunidad natural contra el dengue. Todo niño o adulto puede contraer la infección y desarrollar la enfermedad. Pero consigno un detalle corroborado por las investigaciones: el dengue hemorrágico y el shock por dengue han demostrado ser más frecuentes en blancos y, paradójicamente, en las personas bien nutridas. La acción colectiva ciudadana es el mejor escudo contra la aparición del dengue.