--¿Cuál es el proceso de avance o progresión de la enfermedad? ¿Se localiza exclusivamente al nivel de la piel, o puede afectar también los órganos internos?
--Existen casos en que la enfermedad sólo se limita a alteraciones de la piel, sin afectación de ningún órgano o sistema, pero también pueden existir algunos pacientes con endurecimiento de la piel y además alteraciones digestivas, respiratorias y circulatorias.
--¿Por qué se habla de “incertidumbre diagnóstica” en esta enfermedad?
-- Debido a que en ocasiones, al inicio, muestra síntomas parecidos a otras enfermedades reumáticas, demorando un tiempo en poder definir el diagnóstico.
--¿Qué exámenes se requieren para su confirmación?
--Ante la sospecha clínica se realizan exámenes hematológicos y radiológicos, que pueden ayudar al diagnóstico, pero la confirmación se efectúa a través de la biopsia de piel.
--¿Es igualmente frecuente en el sexo masculino que en el femenino? ¿Y en cuanto a la edad de su aparición?
--Es más frecuente en mujeres que en hombres con una proporción de 4 a 1, presentándose principalmente en la edad fértil (entre los 20 y 40 años).
--¿Es contagiosa? ¿Puede trasmitirse por un simple estrechón de manos o un abrazo, por compartir los mismos utensilios, o a través incluso de las relaciones sexuales con una persona enferma?
--No existe ningún riesgo de contagio de persona a persona.
--¿Cuál es el esquema de tratamiento que se emplea para esta enfermedad? ¿Y su efectividad?
-- Se usan medicamentos para mejorar la circulación de la sangre como antiagregantes plaquetarios (aspirina), vasodilatadores (nifedipina) y antifibróticos (colchicina y Dpenicilamina). Cuando existen dolores articulares se emplean analgésicos, antinflamatorios y pequeñas dosis de esteroides. Las alteraciones digestivas se tratan con medicamentos como la metroclopramida, antiácidos y cimetidina. Los tratamientos disponibles en el mundo en este momento no siempre son capaces de lograr controlar totalmente esta enfermedad.
--¿Se avizora algún nuevo avance en este campo?
--Aunque se hacen esfuerzos para lograr medicamentos más efectivos para esta afección, su control total o cura no se avizora de forma inmediata.
--¿Qué especialistas son los responsables de la atención de estos pacientes?
--Los reumatólogos, dermatólogos y especialistas de Medicina Interna.
--Si tuviera a mano el dato, doctora, ¿quién (cuándo y dónde) describió la esclerodermia?
--En el siglo IV antes nuestra era, el médico griego Hipócrates, considerado el padre de la Medicina, realizó la descripción de personas que presentaban la piel estirada y endurecida, lo que podría constituir la primera descripción de esta enfermedad. Sin embargo, fue el clínico francés Elie Gintrac, en 1860, quien señaló el término esclerodermia.