--¿De acuerdo con su experiencia, se considera un padecimiento frecuente en nuestro medio?
--Quizás podría catalogarse como de frecuencia mediana.
--¿Qué lesiones iniciales pueden alertarnos de este padecimiento?
--En cuanto a la foliculitis de la barba, un enrojecimiento alrededor de los pelos en la zona cubierta por ella, y también sensación de ardor y picazón. Cuando se localiza en la nuca, se manifiesta por pápulas y pustulitas, es decir, abultamientos y lesiones con pus que rodean los pelos; y en la foliculitis de localización en el cuero cabelludo (decalvante), la presencia de islotes de pus cercando el cuero cabelludo.
--¿Y en cuanto a sus signos y síntomas principales?
--En la de la barba, después del eritema (enrojecimiento), van apareciendo cada vez más lesiones con pus del tamaño de una cabeza de alfiler, atravesada por pelos. Estas pústulas se rompen en el acto de afeitarse o lavarse, dejando un punto rojizo que más tarde constituye el lugar de instalación de un nuevo brote de pústulas. En la nuca, las lesiones inflamatorias llevan a la formación posterior de queloides o cicatrices muy engrosadas; en la variedad decalvante, las pústulas se descaman y luego a la caída de los pelos se observan zonas de aspecto cicatricial.
--¿Responde o es resistente a los tratamientos existentes? ¿En general, cuál es el pronóstico de esta enfermedad?
--En general son rebeldes a las terapéuticas y, por la tendencia a la cronicidad, son de pronóstico reservado.
--Un paciente que me escribió, con este padecimiento en el cuero cabelludo, expresaba una lógica desesperación al semejarse la zona afectada, al roce de una mano, "a un verdadero avispero". ¿Existiría algún alivio para ello?
--Por la información que ofrece el paciente, mi impresión diagnóstica es que padece de acné queloideo, una variedad de foliculitis bastante rebelde a los tratamientos. Aplicando una terapéutica ininterrumpidamente, podría llegarse a la casi total remisión de las lesiones inflamatorias de la nuca, aunque siempre persistirían lesiones queloideas en algunos sitios.
--Dejo a su criterio, doctora, un comentario final dirigido a estos enfermos.
--Lo esencial sería mantener siempre una buena higiene personal y llevar una dieta baja en contenido de grasa y dulces. Y como mensaje general para cualquier ciudadano, que ante cualquiera de los signos y síntomas descritos, se acuda sin pérdida de tiempo al médico de familia.