En su diversificación, esta disciplina constituye hoy un campo muy abierto a las investigaciones sobre el desarrollo humano.
El profesor Domínguez, quien es Jefe de la Sección de Neurodesarrollo del Hospital Ginecobstétrico Ramón González Coro, en la capital, comenta que desde el reconocimiento de la Pediatría como especialidad, a mediados del siglo XIX, surgió también entonces el interés de los médicos en poder tener modos y medios para poder evaluar la evolución de las funciones cerebrales y de los sentidos en los niños. Pero la Neurología del Desarrollo aparece "con voz propia" en el panorama de la Medicina en la segunda mitad del siglo XX.En Cuba en los últimos 40 años su auge se debe a tres eminentes médicos y verdaderos maestros que han dedicado sus vidas a la atención de la infancia. Son ellos los Doctores en Ciencias Joaquín Pascual Gispert, Eliseo Prado González y José Pérez Villar.
Luego de este imprescindible recorrido histórico, inicio la ronda de preguntas:—Profesor: ¿cuáles son las secuelas más temidas y, al mismo tiempo, más frecuentes que pueden sufrir los niños a nivel del Neurodesarrollo?
—Dentro de las más temidas están la parálisis o insuficiencia motora de causa cerebral, el retraso mental y la epilepsia. Afortunadamente las más frecuentes son las alteraciones transitorias.—Quisiera ahora precisar qué niños a su nacimiento son considerados "de riesgo" y, por tanto, requerirían de la atención de especialistas en Neurodesarrollo?
—Los de mayor riesgo son los prematuros más pequeños, los recién nacidos desnutridos y aquellos que presentan alteraciones neurológicas precoces debidas a diferentes causas (malformaciones, lesiones cerebrales establecidas antes, durante o después del parto, infección del sistema nervioso, hemorragia intracraneal, y otras).—No sabría, doctor Domínguez, si atendiendo a la necesaria síntesis periodística pudiese esbozar, al menos, qué signos y síntomas fundamentales advierten al médico, e incluso a la familia, de que un recién nacido puede tener comprometido su desarrollo neurológico.
—Los síntomas y signos que deben considerarse en tal sentido son aquellos que expresan algún nivel de alteración en sus funciones cerebrales y de los sentidos. Estos no son más que respuestas anormales a las maniobras clínicas y medios de diagnóstico que se utilizan para la evaluación de su integridad neurológica, así como la presencia de ataques en los primeros días de la vida.El cerebro es responsable de la cognición, las emociones, la memoria y el aprendizaje. Procesa la información sensorial, controla y coordina el movimiento, el comportamiento y funciones corporales como los latidos del corazón, la presión sanguínea, el balance de fluidos y la temperatura...