Entre los que podrían durar de por vida, si no reciben tratamiento adecuado, te citaría el dolor del miembro fantasma (en amputados), la neuralgia de los nervios trigéminos —que son los que se extienden desde el encéfalo hasta la cara (uno a cada lado), incluyendo las arcadas dentarias y la lengua—, y los originados como consecuencia de enfermedad por herpes, entre otros dolores del sistema nervioso.
—¿Existen tratamientos para esos dolores? ¿En qué consisten? ¿Logran al menos alivio a esa dolencia?
—Todos los dolores, agudos o crónicos, y en cualquier ubicación, deben ser tratados.
Para ello se emplean medicamentos analgésicos antinflamatorios no esteroideos, y otros fármacos de mayor potencialidad, así como bloqueos nerviosos, acupuntura, estimulaciones eléctricas, métodos neuroquirúrgicos, fisioterapia y técnicas psicológicas.
Después que publicamos en esta misma sección el artículo Disfunciones sexuales en la mujer obesa el pasado 7 de abril, fuimos abordados por numerosas personas de variadas edades, profesiones y preferencias sexuales, que se interesaban por conocer con mayores detalles lo que había...