Mientras la función del espermatozoide es fertilizar el óvulo, el semen le sirve de vehículo y aporta las sustancias necesarias para su supervivencia y energía. Según criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se considera un semen "normal" aquel que tiene más de 20 millones de espermatozoides por mililitro, con movilidad lineal progresiva de 25% o más y, asimismo, con 30% o más de espermatozoides de forma normal.
Los procederes médicos cuentan con un método básico para valorar el semen: el espermograma, que permite diagnosticar su capacidad fecundante.
Nuestra ponente de esta semana es la doctora Marlene Rosa Gallardo Ríos, jefa del Departamento de Citopatología e Inseminaciones del Instituto Nacional de Endocrinología del Ministerio de Salud Pública, radicado en La Habana, quien es miembro de la Asociación Internacional e Iberoamericana de Andrología.
El agua ha sido motivo de enconadas polémicas entre los que opinan, casi siempre obesos, que el agua engorda y los del bando opuesto, que abrazan la tesis contraria. Sin embargo, y siguiendo los caminos de la lógica, hay una tercera posibilidad, por lo menos teórica: ¿el agua contribuye a...