Médico de saber profundo, que mantiene una incansable actividad profesional con sus 70 años de edad, mi diálogo con el profesor García Fleites comienza con una ineludible inquietud: ¿Cómo explicaría usted la presencia de un Psiquiatra en el abordaje de un tema sobre traumatismos del cráneo?... Ante su solo anuncio, muchos lectores pensarían “encontrarse” con un Neurólogo, o un Neurocirujano o un Cirujano Maxilofacial...
--Ese criterio privativo ha contribuido en muchos casos --dice convencido-- a que los síntomas psíquicos sumamente frecuentes en la evolución del traumatismo cerebral (46% al 100%) sean ignorados o confundidos, conduciendo a estos enfermos a un desenlace negativo: 50% de incapacitados laboralmente e inadaptados vitalmente.
--¿Pero empecemos por el principio, profesor: ¿qué se entiende por traumatismo craneal?
--Es una acción que se convierte en lesionante o nociva para la masa nerviosa (cerebro o encéfalo) y la bóveda craneal (ósea) que la recubre, y que van a determinar las manifestaciones sintomáticas del paciente.
--De acuerdo con su experiencia, ¿cuáles son las causas más frecuentes de estos traumas en nuestro medio?
--Los accidentes de tránsito en primer término, los accidentes laborales, los ocurridos en la práctica de algunos deportes y en otras circunstancias de la vida cotidiana.
--¿Podrían incluirse también los llamados traumatismos sonoros?
--Por sí mismo el ruido no desencadena un traumatismo craneal. Sin embargo, el ruido es un nocivo agente que produce alteraciones en varias funciones, principalmente en la audición. Cuando se asocia a la onda expansiva de las explosiones, se hace particularmente agresivo.
--¿A qué signos y síntomas nos estamos refiriendo concretamente cuando los clasificamos de traumatismos leves, moderados o severos?
--Aparte de síntomas físicos evidentes, como heridas, sangramientos, hinchazón y otros más, el nivel de gravedad puede darlo la toma del estado de conciencia (conocimiento). Mientras más profunda es la afectación de conciencia, más grave el estado del enfermo. Pueden citarse tres grados de pérdida del conocimiento: total (coma), mediano (sopor) y ligero (aturdimiento).
--¿Cuáles son los más temidos por los riesgos que podrían implicar?
--Los casos con fractura y apertura de cráneo y la presencia de sangramiento, parálisis, falta de reacción a estímulos, pero sin subestimar los casos con toma ligera del conocimiento: “aturdidos”, “atolondrados”, “sonsos”,”somnolientos”, “torpes”, “confusos”, pues estos son los más frecuentes y también causan síntomas psíquicos posteriores.
El sedentarismo es una plaga de la edad moderna y como tal debe ser combatido.
Habitualmente, los sedentarios no se consideran como tales y solo perciben la triste realidad cuando se encuentran en un centro de salud recibiendo atención por una enfermedad a veces grave, pero prevenible si...