Instalados en su despacho del Instituto, en la barriada capitalina del Vedado, el doctor Díaz, investigador titular, me comenta que las personas con diabetes son vulnerables a la aparición de ciertas complicaciones a medida que transcurre el tiempo de padecimiento de esta enfermedad.
Sobre este esencial tema, y teniendo en cuenta que en nuestro país se encuentran registrados más de un cuarto de millón de diabéticos, comienzo la ronda de preguntas.
--¿Podría enumerar, profesor, cuáles son estas complicaciones y los órganos afectados?--Existen complicaciones agudas que pueden aparecer incluso como la forma de comienzo de la enfermedad: la cetoacidosis (descontrol) diabética con riesgos de conducir al coma diabético e incluso a la muerte si no se trata, y la hipoglucemia o bajón de azúcar por un uso inadecuado de la insulina.
Las complicaciones crónicas más importantes son la retinopatía que daña la retina del ojo, la nefropatía que tiende a deteriorar la función del riñón, la neuropatía que afecta los nervios, especialmente de las extremidades; y también origina daños a las arterias que nutren al corazón, al cerebro y a las extremidades, y disminuye las defensas contra las infecciones.
--Las complicaciones de los vasos sanguíneos afectan con más frecuencia a los hombres que a las mujeres antes de los 45 años, pero los riesgos se igualan cuando aparece la menopausia en la mujer.
--¿Cuál es el lapso promedio que transcurre entre la instalación propiamente de la diabetes y la aparición de los primeros síntomas de alguna de las complicaciones derivadas de este padecimiento?--Las complicaciones agudas se pueden manifestar en cualquier momento; las crónicas casi siempre ocurren después de transcurrido un tiempo prolongado de la enfermedad, digamos más de 10 años. Sin embargo, a veces (en alrededor de un 30% de los pacientes) aparecen acompañando el inicio de una diabetes oculta.
--¿Existiría alguna posibilidad de evitar el desencadenamiento de estas complicaciones?... ¿O acaso sólo es posible retardarlas?--Las complicaciones agudas pueden ser evitadas totalmente; en cuanto a las crónicas, algunas de ellas no pueden ser evitadas, aunque en la mayoría de los casos es posible retardarlas o atenuar su gravedad.
--¿Podría conocerse con antelación, en cada paciente en particular, el órgano-diana de la complicación?--Los antecedentes familiares de complicaciones permiten sospechar su evolución. Por ejemplo, si se detectan pequeñas concentraciones de albúmina en orina se puede esperar la aparición de una nefropatía diabética. El examen periódico del fondo de ojo posibilita sospechar con antelación el progreso de una retinopatía. En ambos casos es posible establecer acciones preventivas.
Esta educación especializada es un arma preciosa en el arsenal terapéutico del paciente diabético que, educado en lo que significa su enfermedad, brindará al personal de salud a cargo de su atención una valiosísima cooperación, para su propio beneficio. Además, le permitirá...