La expresión inglesa piercing, “peforación hecha en una parte del cuerpo distinta del lóbulo de la oreja para insertar pendientes, aros u otros ornamentos”, ha sido adaptada gráficamente al español, y desde el 2005 la Real Academia recomienda escribir pirsin (y pírsines, en plural). Esa costumbre, en verdad tan antigua como el hombre, ha devenido “moda” en los últimos años, desconociéndose acaso los riesgos innecesarios que puede comportar para la salud.
Con particularidad abordaremos en esta consulta los “aditamentos” que se implantan en la cavidad oral (en dientes, lengua, labios), atendiendo a que numerosos estudios demuestran que las personas que llevan pirsin en la boca corren el peligro de sufrir graves trastornos, para los cuales ni siquiera la cirugía ofrece solución por el momento.
El doctor Francisco Villar Sánchez, especialista en Administración y Organización de Servicios de Salud y Director de la Clínica Estomatológica Miramar, en el municipio Playa, Ciudad de La Habana, considera que en Cuba no somos ajenos a esta “mal llamada moda”.
Cuando el cerebro realiza una función lo hace a la manera de una orquesta sinfónica donde interactúan varias áreas entre sí. A pesar de que representa solo entre el 1,5 y el 2 por ciento de todo el peso del cuerpo humano, procesa la información sensorial, controla y coordina...