—¿Un estado transitorio de insomnio, ante situaciones de gran ansiedad, o tristeza, o preocupaciones de alguna índole, podría convertirse en crónico?
Por supuesto, sobre todo si la persona se mantiene expuesta mucho tiempo a la causa que lo originó, por lo que es necesario identificar esa situación y tratarla adecuadamente.
—¿En qué momento es posible determinar que una persona se encuentra en incapacidad para conseguir suficiente calidad y cantidad de sueño?
La cantidad y calidad de sueño no se alcanzan si estamos en presencia de estrés mantenido, condiciones adversas para dormir como el ruido intenso, el frío, el calor, la activación física o mental, el consumo de café, bebidas alcohólicas, drogas o la presencia de alguna enfermedad respiratoria, cardiovascular, neurológica, entre otras.
—¿A mayor edad se duerme menos? Quiero decir, sin padecer de insomnio una persona mayor de 60-70 años tendría menos requerimientos de sueño que un niño o un adulto?
La organización del ciclo sueño-vigilia y la cantidad total de sueño son diferentes en las distintas etapas de la vida, lo que está determinado por las necesidades de cada una de éstas.
El recién nacido duerme casi 20 horas diarias, lo que va disminuyendo a través de la vida. El escolar duerme 10-11 horas, el adolescente 9 y el adulto entre 7 u 8 horas; el adulto mayor duerme 6 horas o menos, lo que no debe interpretarse como insomnio.
—Sabemos que los cubanos son ciertamente ágiles a la hora de automedicarse: le solicito un comentario en torno al empleo de los tranquilizantes, sus beneficios y efectos secundarios.
Los tranquilizantes son beneficiosos cuando son indicados por el médico, quien tendrá en cuenta el sedante y las dosis apropiadas según el tipo de insomnio. Es extremadamente perjudicial automedicarse en cualquier circunstancia, lo que es peor si se trata de insomnio, porque puede agravarlo (a través de los mecanismos de adicción) y originar otros síntomas como disminución de la vigilia y de la memoria, incoordinación motora y confusión.
—¿Qué vías sugiere, ante un persistente insomnio, para establecer un tratamiento correcto?
Lo mejor es buscar ayuda profesional. Debe acudir al médico de familia, quien emitirá un diagnóstico para instaurar el tratamiento correcto. Si el paciente lo requiere, será evaluado en una consulta especializada.
—¿Es curable?
Siempre es tratable y su curación depende de la causa que lo origina y el tiempo de evolución.
—Ante una noche de insomnio transitorio, ¿qué sugeriría?... ¿Sería efectivo quizás contar ovejitas?
Lo ideal sería conocer qué nos quitó el sueño. Lo esencial del insomnio es el aspecto preventivo. Es imprescindible poner en práctica medidas de higiene del sueño, las que están indisolublemente ligadas a la calidad de nuestra vigilia; es saludable llevar un régimen de vida lo más estable posible, evitar los hábitos tóxicos y no llevar las preocupaciones del día al lecho. Si no logra eso... ¡podrá contar ovejitas hasta el amanecer!
Varias investigaciones han demostrado...