Migraña o jaqueca son términos sinónimos que definen un tipo de dolor de cabeza que se caracteriza por crisis generalmente localizada en uno de los hemisferios del cerebro, que dura entre 4 y 72 horas y es capaz de incapacitar la actividad habitual o al menos limitarla. Suele acompañarse de náuseas, vómitos, hipersensibilidad o molestias a la luz y los ruidos.
La Profesora Asistente Irma Regla Olivera Leal, especialista en Neurología y también en Medicina General Integral, quien se desempeña en el Hospital Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras, precisa que pueden aparecer “signos de aviso” de ese dolor horas o días antes de la crisis propiamente, con cambios en el estado de ánimo y la conducta. Y añade: en la crisis franca, el dolor pulsa, puede ser entonces unilateral o bilateral y después de estas crisis la persona podría experimentar agotamiento, debilidad y apatía.
––Una aclaración: ¿esos “signos de aviso” se conocen como “aura”?
––No, el “aura” son síntomas neurológicos previos al dolor de cabeza asociados con cambios en la visión (destellos de luces y colores) y origina también una sensación extraña de pinchazo, entumecimiento, debilidad muscular y dificultades para la comunicación.
El proceso se inicia por la presencia de determinados estímulos para los cuales esa persona es sensible.
––¿Estarían implicados factores de orden genético y hereditario?
––Hay antecedentes familiares en el 70% de los casos sin que se haya podido establecer un patrón de herencia determinado.
Se descubrió un tipo especial de migraña que aparece en niños (migraña hemipléjica familiar), asociada a un gen localizado en el cromosoma 19.
––¿Presenta algún patrón de periodicidad para su desencadenamiento?
––No, varía su frecuencia, intensidad y duración incluso en un mismo paciente.
Hay mujeres, por ejemplo, que solo presentan crisis en ciertas etapas del período menstrual o durante la ovulación.
Los frutos secos son aquellos con un contenido de menos de un 50 % de agua y son ricos en proteínas, grasas poliinsaturadas como el omega 3, vitaminas (fundamentalmente la E y las del grupo B), así como también minerales como el fósforo, el magnesio, el cobre o el hierro. De...