Calcio
El calcio, uno de los minerales más importantes en el organismo humano, participa en la formación y estructura de los huesos y es necesario para la contracción de los músculos, incluyendo el cardiaco, así como para el funcionamiento del cerebro y los nervios. Los suplementos de calcio sólo son necesarios cuando hay un incremento de la demanda. Esto ocurre en la niñez, en el embarazo y durante la lactancia materna, o cuando se reduce su absorción en el aparato digestivo ya sea en la tercera edad o porque la dieta no es capaz de suministrarlo. Cuando los suplemetos se consumen de forma inadecuada el incremento de calcio en sangre puede provocar trastornos en el funcionamiento de varios órganos y sistemas del cuerpo y se produce pérdida del apetito, decaimiento, dolores abdominales, náuseas, estreñimiento, palpitaciones y nerviosismo.
Fuente: Centro para el Desarrollo de la Farmacoepidemiología
Paracetamol
El paracetamol pertenece al grupo de los analgésicos y antipiréticos; actúa inhibiendo a las prostaglandinas. Existe gran riesgo en la interacción entre el alcohol y el paracetamol. Pues el alcohol inhibe la destrucción del medicamento por el hígado lo que provoca un aumento de la concentración en la sangre del mismo con la consecuente toxicidad sobre las células hepáticas, causante de síntomas y signos diversos como náuseas, vómitos, dolor abdominal, mareos y decaimiento intenso.
Fuente: Centro para el Desarrollo de la Farmacoepidemiología