Una gran desconocida para la ciencia durante muchos años, la hipófisis -una glándula del tamaño de un garbanzo situada en lo profundo del cerebro- rige todo el funcionamiento hormonal del organismo. Es responsable de funciones tan importantes como producir estímulos en el útero para que se contraiga durante el trabajo de parto y con posterioridad vuelva a su tamaño normal, regula el crecimiento de los tejidos orgánicos, influye sobre la composición de la orina, dirige el desarrollo y función del tiroides e induce la lactancia materna.
Defiende incluso la vida misma a través de las glándulas suprarrenales al producir adrenalina, que en momentos de excitación o estrés emocional actúa sobre las estructuras del cuerpo preparándolo para el esfuerzo físico.
¿Se me queda algo en el tintero con respecto a las principales funciones que se conoce realiza la hipófisis?, indagué con el doctor Iván García Maeso, jefe del Servicio de Neurología y Neurocirugía del Centro Internacional de Restauración Neurológica (CIREN), de Ciudad de La Habana.
--Subrayar quizás que esta glándula es la encargada de vigilar y gobernar gran parte del equilibrio endocrino del organismo.
Como se sabe, los "mensajeros químicos", las hormonas, viajan por el torrente sanguíneo y se detienen en algunos tejidos para favorecer funciones como el crecimiento y la reproducción.
--¿Cuáles son las causas principales de su disfunción o mal funcionamiento?
--Pueden existir anomalías en su desarrollo, pero en general, en un elevado porcentaje, el mal funcionamiento de la hipófisis responde al desarrollo de lesiones en esta glándula, mayoritariamente de naturaleza benigna.
--¿Qué signos y síntomas pueden derivarse de esas alteraciones?
--Dolores de cabeza, pérdida de la visión, alteraciones de la movilidad del ojo, visión doble, trastornos en la sensibilidad de la cara, aumento de la presión intracraneal. Pueden producirse también desarreglos de la menstruación e infertilidad en las mujeres, secreción de leche por las mamas sin estar embarazadas; y en los hombres trastornos sexuales (disminución del deseo), aumento del tamaño de las mamas, fundamentalmente.
--¿Es posible que algunos casos de migraña puedan deberse a la presencia de una lesión en la hipófisis?
--El dolor de cabeza (cefalea) que se atribuye a esta enfermedad no es de tipo migrañoso y tiene una localización característica. El dolor se manifiesta en ambas sienes, en la frente y detrás del globo ocular.