Hace exactamente un siglo, en el año 1906, el médico Clements von Pirquet empleó por primera vez la palabra alergia, que por su origen griego significa una manera distinta de reaccionar, para expresar “reactividad alterada”.
El especialista vienés describió entonces como personas alérgicas a aquellas que tenían respuestas excesivas “a algo” en su medio ambiente.
Ahora junto al Doctor en Ciencias Rubén Rodríguez Gavaldá, Profesor de Mérito, reconocido internacionalmente en su especialidad, Alergología e Inmunología Pediátrica, nos aclara que cuando expresamos que una enfermedad es alérgica, se comete un serio error, “porque alérgica no es una enfermedad sino la persona”.
Con sus lúcidos 92 años de edad, el científico cubano continúa desempeñando una activa vida laboral en lo asistencial (en el Pediátrico William Soler de Altahabana), en lo docente e investigativo. Es Presidente de uno de los tribunales que confiere el grado de Doctor en Ciencias en nuestro país.
El tema revela su importancia cuando conocemos que estudios realizados indican que un 32% de nuestra población es alérgica a alguna sustancia conocida (alimentos, polen, animales) y es una cifra que va en aumento.
Entre las principales se encuentra el polen de las plantas, el ácaro, que forman parte importantísima del polvo casero.
—¿A qué edad suele aparecer este trastorno?
—Generalmente se manifiesta desde el nacimiento.