En uno de nuestros artículos, Hablemos de calorías, exponíamos los más recientes criterios en cuanto a la importancia de conocer adecuadamente el papel jugado por ellas dentro de una correcta nutrición. Todo extremo es desequilibrante y a este concepto no escapa cuanto bocado ingerimos. Por eso una alimentación balanceada debe ser variada y contener también una porción adecuada de proteínas, preferiblemente obtenida de las llamadas carnes blancas, y de grasas así como de productos lácteos preferentemente descremados y cereales integrales.

Aunque no existe una fórmula numérica de uso común para seleccionar con matemática exactitud las proporciones de nuestros alimentos, no es mala idea que la mitad o como mínimo, la cuarta parte de la diaria alimentación debería estar compuesta de alimentos de calorías negativas.

En el diario deambular, es lamentable como los comelones y las comelonas de a pie, sacian su apetito y de paso aumentan su peso corporal con alimentos de altísima concentración calórica. Ofrendan su salud en los altares, llámese mostradores, de los sitios expendedores de comidas rápidas y poco saludables.

Es altamente recomendable una sana merienda a base de frutas de ocasión tomada al paso en los expendios populares de este tipo de alimentos.

Lo mismo puede obtenerse una tajada de melón, un trozo de frutabomba, plátanos fruta, guayaba entera o en trozos, naranjas ya desprovistas de su cáscara o el sabroso platanito y que aportan tanto bien al organismo.

A propósito dejé para el final, para un mejor recuerdo, la lista de algunos alimentos que nos hacen desembolsar más calorías con un aporte proporcionalmente menor. Son ellos col, apio, pepino, lechuga, zanahoria, lentejas, espinaca, tomates, naranjas, mandarina, melón, manzana, frutabomba, toronja, etc. Por supuesto, todas consumidas con la parte sólida comestible.

Cuando contemple un alimento no se quede en lo inmediato, vea más allá del plato y piense en las calorías. Un poco de pensamiento abstracto y reflexivo siempre nos hace bien.

Dr. Alberto Quirantes Hernández, Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente "Dr. Salvador Allende"
Fuente: Cubahora