Con visión simplificadora definiríamos artrosis como la enfermedad de las articulaciones en la que la capa protectora situada en los extremos de los huesos, el cartílago (una especie de almohadillado), se desgasta y los huesos subyacentes empiezan a rozar entre sí.
El cartílago se consume y repone continuamente. Cuando se desgasta más rápido de lo que se repone es cuando aparece esta dolencia, que puede producir rigidez articular y deformidad y se convierte en crónica.
Las articulaciones de las manos, las caderas y las rodillas son las que más se afectan.
Nuestro ponente de esta semana es el doctor Julio Castillo Sanamé, especialista de primer grado en Ortopedia y Traumatología, responsable del Grupo de Miembros Inferiores del Servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras, quien realiza investigaciones sobre la artrosis de cadera desde hace más de dos décadas.
¿Conoce la ciencia las causas principales de la aparición de esta afección?, pregunté inicialmente al profesor Castillo.
––Hay causas bien determinadas. Y te cito, entre ellas, las que se originan luego de sufrir un traumatismo (llamada artrosis postraumática), o por necrosis (muerte de tejidos) de la cabeza femoral.
Cuando el cerebro realiza una función lo hace a la manera de una orquesta sinfónica donde interactúan varias áreas entre sí. A pesar de que representa solo entre el 1,5 y el 2 por ciento de todo el peso del cuerpo humano, procesa la información sensorial, controla y coordina...