Hablando del queso(Cont.)
El queso y el yogur son productos fermentados y, por eso contienen las llamadas bacterias probióticas. Muchos son los beneficios asociados a éstas, pues no sólo reducen el número de bacterias patógenas de nuestro organismo, pues también interaccionan con nuestro metabolismo aportando diferentes beneficios, como podría ser la disminución de los triglicéridos de la sangre.
BENEFICIOS DE LOS PRODUCTOS LÁCTEOS FERMENTADOS
Muchos son los efectos positivos obtenidos por quienes consumen este tipo de alimentos, sobre todos para el sistema cardiovascular.
En diversas investigaciones ha sido demostrado cómo el consumo de yogur se vincula con una menor prevalencia de adiposidad central y total, de un mejor control de la glicemia, de la presión arterial elevada y de la hipertrigliceridemia, además de estimular un aumento del colesterol “bueno.
En una revisión reciente de un grupo de estudios, sus resultados demuestran cómo comer queso también puede reducir el riesgo de enfermedades del corazón.
El queso contiene calcio para reducir el riesgo de osteoporosis y proteínas para la síntesis y reparación de los tejidos, ambos ingredientes saludables, así como bacterias y levaduras beneficiosas para el microbioma.
LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE NUTRICIÓN
Recomiendan el consumo de 2 a 4 raciones al día de lácteos de buena calidad como es la leche, quesos y/o leche fermentada, con el rango de consumo superior en casos de embarazo y lactancia.
Esta cantidad es muy similar al propuesto a nivel internacional, donde las guías aconsejan tomar de 2 a 3 raciones diarias.