Valoración de las carnes rojas y procesadas en la dieta del diabético(Cont.)
Cocinar a altas temperaturas o con la comida en contacto directo con una llama o una superficie caliente, como la barbacoa o la sartén, produce mayores cantidades de ciertos tipos de químicos cancerígenos, como los llamados hidrocarburos aromáticos policíclicos y las aminas aromáticas heterocíclicas.
Hay fuertes evidencias de asociación entre el consumo de carne roja con el cáncer colorrectal. También de vinculación con cáncer de páncreas y cáncer de próstata.
El consumo de carne procesada se conoce como factor causal de cáncer colorrectal. También se ha asociado con el cáncer de estómago.
Alrededor de 34,000 muertes por cáncer al año en todo el mundo son atribuibles a dietas ricas en carne procesada.
Las dietas ricas en carnes rojas podrían ser responsables de 50,000 muertes por cáncer al año en todo el mundo.
El riesgo generalmente aumenta con la cantidad de carne consumida.
Cada porción de 50 gramos de carne procesada aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en aproximadamente un 18 por ciento; y un 17 por ciento por cada porción de 100 gramos de carne roja, consumidas diariamente.
Las personas preocupadas por el cáncer podrían considerar reducir su consumo de carne roja y carne procesada hasta que se emitan directrices actualizadas y definitivas relacionadas específicamente con el cáncer y estos tipos de alimentos cárnicos.
CONSUMO DE CARNES EN LA DIABETES
Las carnes del menú para diabéticos deben ser: pescado, pollo, ternera, pavo, res adulta, conejo y muy eventualmente, cerdo. Desde luego, las carnes deben estar totalmente libres de todo tipo de grasa.